La sirena del Puente Bolognesi

Las sirenas, a lo largo de la historia, siempre han sido símbolo de sensualidad y tentación. Y es por ello que no fueron ajenas a la ciudad blanca, Arequipa.

Según moradores del lugar, afirman que en el Puente Bolognesi aparece una sirena que, en cuanto ve a hombres cerca, utiliza sus encantos para seducirlos y llevarlos con ella.

Los pobladores de la ciudad del Puente Bolognesi, aseguran que en épocas de lluvias y al llegar la medianoche, se puede observar la aparición de una bella mujer de hermosa voz encima de la enorme piedra que está al pie del puente en pleno lecho del río.

Historia

La Sirena era una mujer que esperaba a su amado cerca a una escalerilla que rodeaba la acequia, junto al margen izquierdo del río Chili. A una hora precisa, la mujer con cola de pez hacía su aparición en el río y a la vez, aparecía un hombre desnudo en el callejón Ibáñez, arrastrando unas cadenas y subiendo un poste. Se piensa que es era para divisar a su amada. Poco después, el enamorado humano hace su recorrido, bajando a la casa que colinda con el río, para perderse en medio de la noche y encontrarse finalmente con la ninfa de las aguas que lo espera en medio de cánticos y tenues luces que se dan paso en tan descomunal piedra.

La piedra "Machiruna"

La piedra en la que se dice que habita la hermosa sirena, se denominó con el nombre de "Machiruna", se cuenta que posee una entrada a un río subterráneo (hogar de las sirena) que se encuentra justo detrás del Río Chili. También se cuenta que la piedra se mantiene en su lugar gracias a la fuerza de los brazos de todos los hombres que fueron atrapados por ellas.

Más de una

Se dice que cuando hay celebraciones y fiestas importantes, no solo sale una, sino varias de su hogar subterráneo a las 6 o 7 de la noche buscando jóvenes para atraparlos y divertirse a su manera.

Se posan coquetamente en la gran piedra atrayendo a los incautos jóvenes que pasen por ahí, los hombres al verlas quedan encantados y no resisten a sus dulces encantos, por lo que se acercan cada vez más a las sirenas que se presentan con largos y sedosos cabellos, siluetas hermosas y colas de bellos y brillantes colores. Una vez que el desdichado joven es atrapado por las mujeres, desaparece entre las espumosas aguas del Río Chili y no es visto nunca más.

Antes de que aclarase el día, cuentan otros vecinos, que la piedra se convertía en una morada llena de bonitas muchachas que salían en espera de algún inocente hombre para llevarlo a sus dominios. Asimismo, se dice que dichas sirenas eran las causantes de que muchas personas se arrojaran desde lo alto del puente contra el lecho del río.